miércoles, 28 de octubre de 2015

Operación Olympic: el plan que nunca llegó

¿Qué habría pasado si Japón no se hubiera rendido ante EEUU a comienzos de septiembre de 1945 en lo que fue, en definitiva, nada menos que el punto final de la Segunda Guerra Mundial? La pregunta no es capciosa: Japón se rinde por la explosión de las bombas atómicas de Hiroshima y Nagasaki, y esa operación de triste memoria sólo era conocida por unos pocos en el ejército de los EEUU. De manera que la mayor parte de sus mandos del Estado Mayor no podían prever que Japón fuera a capitular y se trabajaba en otro ambicioso escenario estratégico: la invasión del archipiélago nipón, la llamada Operación Downfall, que estaba prevista para principios de noviembre.
Un doble plan que combinaba operaciones terrestres, aéreas y marítimas, con varios frentes geográficos y que se articulaba en dos fases:
- 1. La Operación Olympic, cuyo objetivo era la isla más septentrional de Japón (Kyushu), que planeaba movilizar a tres ejércitos en la costa sur de la isla con el apoyo de 34 portaaviones, incluida la cobertura de la aviación que operaba en Okinawa.
- 2. La Operación Coronet, cuyo objetivo militar era la invasión de la mismísima Tokio, previo desembarco de las tropas americanas en el centro de Honshu (la isla más grande del archipiélago nipón) y el avance de las mismas por la llanura de Kanto con el doble de efectivos que en la operación anterior.
El plan nunca se llevó a cabo: la rendición japonesa lo abortó. Y si bien las bombas atómicas causaron una auténtica masacre en Japón, también resulta incalculable el número de víctimas que hubieran sumado las operaciones Olympic y Coronet a la contienda mundial, conociendo a posteriori los planes de defensa japoneses.

Ketsu-go, el plan japonés
Los nipones, por su parte, también estaban decididos a luchar hasta el final y su inteligencia militar estaba igualmente muy atareada en aquellas fechas previas a su propia (y desconocida) rendición. Su plan defensivo se llamó Ketsu-Go y, acogiéndose a la Ley del Servicio Militar Voluntario, preveía formar y movilizar a una población civil de 28 millones de hombres dispuestos a defender su patria a sangre y fuego con todo tipo armamento.
Por otra parte, la fuerza aérea japonesa no estaba tan aniquilada como pensaba el ejército estadounidense. Japón había reservado pilotos, aviones y combustible para afrontar la invasión, tenía aeropuertos camuflados por todo el país y preveía lanzar la mitad de esta fuerza aérea (kamikazes) contra el invasor en cuanto éste se acercara a sus costas.
Además, la Marina nipona aún disponía de 2 cruceros y 23 destructores, varios minisubmarinos, torpedos humanos y lanchas suicidas repletas de explosivos dispuestas y preparadas para ser lanzadas contra los buques enemigos. Pero ese momento histórico nunca llegó.

Kyushu

miércoles, 7 de octubre de 2015

Pioneros de la infografía

En el siglo XVIII surge el movimiento de la Ilustración, fundamental para comprender el mundo moderno, pues muchos de los acontecimientos políticos, sociales, económicos, culturales e intelectuales de esos años, han extendido su influencia hasta la actualidad.
Los avances científicos y tecnológicos propician el nacimiento de la representación gráfica de los datos, teniendo como principales autores a tres intelectuales que vale la pena destacar:

Joseph Priestley (1733-1804)

Destacado científico y teólogo, gozó de muy buena reputación como investigador, siendo muy prolífico en la publicación de obras sobre ciencia y religión. Se le considera uno de los descubridores del oxígeno, ya que consiguió aislarlo en forma gaseosa.
En el campo de la visualización de datos, destaca por ser creador de líneas de tiempo de épocas históricas, que facilitaban una lectura de los periodos históricos de una forma más analítica, considerándose uno de los precursores de la representación gráfica.


  

William Playfair (1759-1823)

Ingeniero y economista escocés, se le considera el padre de la visualización de datos estadísticos. Al mismo tiempo que intentaba establecerse en distintos negocios y oficios se dedicó al análisis económico, publicando en 1786 su primera obra: Atlas Comercial y Político, que contiene el primer gráfico de barras.
En 1801 publica el Breviario Estadístico, con datos demográficos y económicos europeos, y en el destaca la representación del primer diagrama de sectores.
Su teoría era que un buen gráfico proporcionaba una visión más adecuada y clara que una mera lista de datos, sirviendo para simplificar lo complejo, permitiendo una mayor retención.


  

Charles Joseph Minard (1781-1870)

Ingeniero civil francés, reconocido por su gran trabajo en el campo de la representación gráfica.
Estudió ciencias y matemáticas, trabajando en numerosos proyectos de ingeniería civil por toda Europa, en 1830 fue nombrado superintendente de la Escuela Nacional de Puentes y Caminos francesa.
Fue creador de los llamados cartogramas: mapas geográficos donde se representan distintos datos numéricos o estadísticos. Su obra más famosa Mapa figurativo sobre las sucesivas pérdidas de hombres de la Armada Francesa en la campaña de Rusia 1812-1813.






En este gráfico se analiza en un contexto geográfico, cómo se van perdiendo hombres en su ruta por el centro de Europa hasta Moscú y su posterior regreso.
Comenzando con un grosor de línea (donde cada milímetro de ancho son 10.000 soldados), el trazo merma conforme se avanza hacia el objetivo y muestra distintas variables:
- La situación y dirección de las tropas, permitiendo visualizar cómo se dividen y reagrupan las unidades.
- Las distintas temperaturas en la retirada y su impacto en el número de bajas.
Este cartograma es considerado una obra maestra dentro de la representación de datos en un ámbito geográfico.